La Premier, de fútbol para todos a privilegio para pocos: ¿por qué es tan difícil ver al ‘Big Six’?
Los mejores clubes de la Premier League han subido sus entradas para esta temporada, haciendo que sus más fieles seguidores sean reemplazados por turistas extranjeros.
Asistir a un partido de la Premier League, como el esperado enfrentamiento entre el Manchester City y el Arsenal este domingo, ya no es solo un evento deportivo, sino un privilegio reservado para unos pocos. Los hinchas se encuentran enfrentando una realidad en la que el acceso a los estadios se ha convertido en un lujo exclusivo, más allá del alcance de la mayoría. Las protestas de las aficiones de los clubes ingleses han sido una constante en los últimos meses, especialmente debido al aumento generalizado en el precio de las entradas. Este incremento, considerado desproporcionado por muchos seguidores, ha llevado a una situación en la que los turistas y seguidores extranjeros tienen más probabilidades de asegurarse un lugar en el estadio que los seguidores locales.
Los llamados Big Six de la Liga Inglesa, incluyendo al Manchester City, Arsenal, Liverpool, Manchester United, Chelsea y Tottenham, han sido los impulsores de esta tendencia alcista en los precios. Con la necesidad de equilibrar sus cuentas y cumplir con los estrictos controles de sostenibilidad, estos clubs ya no ocultan su intención de encarecer los tickets, especialmente para los partidos de alta demanda y expectación.
Para muchos equipos, el aumento de las recaudaciones es la única manera de compensar el crecimiento de sus presupuestos y mantener la estabilidad financiera. Sin embargo, esto ha llevado a una situación en la que presenciar un partido de la Premier puede costar entre 35 y 55 libras en los asientos más baratos, con precios aún más altos para los partidos contra los equipos más grandes de la liga.
El aumento de los precios no solo afecta a los aficionados locales, sino también a los visitantes. Aunque existe un límite de 30 libras para las entradas de los colectivos visitantes durante toda la liga, conseguir una entrada para un partido del Big Six puede ser una tarea casi imposible sin recurrir a la reventa a precios exorbitantes.
Con 17 de los 20 clubes de la Premier aumentando los precios de las entradas en porcentajes que van del 6 al 15 %, la situación ha generado una gran tensión entre hinchas y dirigentes de los clubes. Equipos como el Tottenham y el Chelsea han sido objeto de críticas por parte de sus seguidores, quienes los acusan de explotar su lealtad y privilegiar a los “aficionados de plástico” sobre los seguidores de toda la vida.
El Chelsea, en particular, ha enfurecido a sus seguidores al establecer el precio de entrada más caro en la historia de la Premier, alcanzando las 5.000 libras para un partido contra el Manchester United. Este enfoque en maximizar las ganancias ha llevado a la introducción de categorías de entradas premium, dirigidas a empresas y turistas, con precios que superan incluso el abono más caro de la liga.
La Premier se está transformando en un espectáculo de lujo, donde los aficionados están dispuestos a pagar precios elevados por una experiencia única en un estadio inglés. Sin embargo, esta tendencia plantea serias preguntas sobre la accesibilidad y la equidad en el deporte, con la preocupación de que el fútbol esté cada vez más reservado para una élite de espectadores.
Fuente: Depor